La primera mejora que debe hacer en su bicicleta

Si estás buscando la mejor mejora en relación calidad-precio para tu bicicleta, la respuesta es clara: las llantas.

Sí, puede que no sean la actualización más llamativa, pero su impacto en el rendimiento, la comodidad y la seguridad de tu bici es enorme. Después de todo, las llantas son el único punto de contacto entre tu bicicleta y el suelo, lo que significa que influyen directamente en la forma en que rueda, frena y responde en cada trayecto.

Más rendimiento con menos peso

Una de las razones principales para cambiar las llantas es la reducción de peso. Tomemos como ejemplo la Trek Emonda ALR, que viene equipada con llantas R1 de talón de alambre de 360 g cada una. Si decides invertir en un par de llantas Aeolus RSL de Trek, reducirás el peso en 150 g por llanta, lo que significa un ahorro de aproximadamente ⅓ de kilo en peso rotacional. Y eso se siente mucho más que aligerar cualquier otra parte de la bici.

Menos resistencia, más velocidad

Las llantas de alta gama no solo son más ligeras, sino que también reducen la resistencia a la rodadura. Gracias a compuestos de caucho avanzados y carcasas más flexibles, estas llantas disminuyen la fricción interna, lo que se traduce en menos esfuerzo para mantener la velocidad. Dependiendo de la llanta, esta mejora puede significar entre 5 y 10 vatios menos de esfuerzo por llanta, lo que te permitirá rodar más rápido con el mismo nivel de energía.

Mayor comodidad y agarre

Las llantas de mejor calidad también aumentan la comodidad al absorber mejor las imperfecciones del camino, lo que reduce la vibración y hace que el pedaleo sea más fluido. Además, ofrecen un mejor agarre gracias a sus compuestos de goma avanzados, lo que mejora la estabilidad y la seguridad en curvas y frenadas.

¿Y en bicicletas de montaña?

Si eres amante del MTB, la historia es la misma, pero con un giro interesante: 

Cambiar tus llantas no solo mejora el rendimiento, sino que puede hacer que tu bicicleta se adapte mejor a tu estilo de conducción y a los terrenos por los que ruedas.

Tomemos como ejemplo la Trek Marlin 7 Gen 3, equipada con llantas Maxxis Ardent de 964 g cada una. Si las cambias por un par de Bontrager Sainte-Anne RSL (770 g cada una), estarías ahorrando casi medio kilo en peso rotacional. Esto mejora la aceleración y la maniobrabilidad, pero lo más importante es que puedes elegir llantas que se adapten mejor al terreno en el que pedaleas, ya sea rocoso, arenoso o con raíces resbaladizas.

¿Vale la pena cambiar las llantas?

Definitivamente sí. Las llantas son una de las mejoras más rentables y efectivas que puedes hacerle a tu bicicleta. Ya sea que busques más velocidad, mayor comodidad o mejor agarre, una buena elección de llantas puede transformar por completo tu experiencia sobre dos ruedas.

Así que la próxima vez que pienses en mejorar tu bicicleta, antes de invertir en componentes costosos como ruedas de carbono o rodamientos cerámicos, considera algo más simple y efectivo: un nuevo juego de llantas. 

Fuentes: